De cómo fue que la UNAM alcanzó su autonomía. (1ra parte: Introducción).

Como bien sabemos la mayoría, Justo Sierra fue el personaje que inicializó la idea de autonomía en la Universidad de México. Sin embargo, no hubo los medios ni el apoyo a que esta idea (¿qué es la autonomía en los casos universitarios? Es la condición en la cual la universidad conserva con entera libertad e independencia aquello que constituye su manera de ser esencial, característica y propia, todo esto refiriéndonos a los cambios que se querían aplicar en los sistemas de exámenes y en el sistema educativo).

 Entrando más en este tema, podemos decir que a fines de la tercera década del siglo (hablamos de 1929), se sucitó en México un movimiento estudiantil y se considera de gran importancia por haber culminado con la autonomía universitaria.

A través de los años se realizxaron diversos proyectos sobre la independencia del pensamiento universitario, pero éstos no progresaban (como el de don Justo Sierra).

En el ligro Síntesis Histórica de la Universidad de México se dice que la exigencia de la autonomía pedida en Córdoba, Argentina se dio como exigencia profunda en otras partes de América. En México tuvo su correspondencia en los congresos estudiantiles celebrados a lo largo de varios años (hubo seis congresos estudiantiles con el propósito de llegar a la formación de una clase estudiantil completa, fuerte y culta, con tendencias sociales definitivas y capaz de ejercer una acción eficaz en los destinos de la patria, sin lugar a dudas otro antecedente a la autonomía de la UNAM).

También se menciona que "nuetro régimen universitario -aún el más reciente- es anacrónico. Está fundado sobre una especie de derecho divino: el derecho divino del profesorado universitario. Se crea a sí mismo. En él renace y en él muere. Mantiene un alejamiento olímpico. La Federación Universitaria de Córdoba se alza para luchar contra el régimen y entiende queen ello va la vida".

Realmente la Reforma Universitaria se inició en Argentina y resonó en América con eco gigantesco. Con el Manifiesto de Teodoro Roca (o el movimiento que en 1918 lo produjo, el tratado de Liminar, también por Teodoro Roca) se concretaban las demanadas de la nueva generación.

 

Teodoro (o Deodoro) Roca

En México, el movimiento de huelga de 1929, fue el episodio culminante de un ideal que siempre persiguieron los estudiantes universitarios y que se consiguió por la intergación estudiantil y por el que atravesaba el país en aquellos días.

La organización estudiantil se inició desde el año 1907  con la participación de la Sociedad de Alumnos de la Escuela Nacional de Medicina. Esta agrupación fue tomando fuerza, llegó a agrupar a estudiantes de toda la República.

Se perfilaba de manera precisa e ineludible el problema de la autonomía, de tal modo que más tarde el Consejo Universitario en el memorial enviado al Congreso de la Unión apoyando la solicitud de facultades extraordinarias que hizo el Presidente Portes Gil, para expedir la Ley de Autonomía, pudo afirmar que: "desde la creación de la Universidad, un germén de autonomía ya fue admitido".

 El presidente Portes Gil

"La constitución de 1917, que restableció el orden legar de la República, admitía como un ideal que las instituciones de cultura superior fueran autónomas y libres".

Esta situación se prolongó hasta 1921 en que la Constitución fue reformada, creándose nuevamente la Secretaría de Educación Pública (SEP).
Por otra parte, durante su gestión como rector de la Universidad Nacional de México, José Vasconcelos impartió a los estudiantes sus conocimientos y les dio todo su apoyo para iniciar una "revolución cultural/educativa". Una de sus resoluciones, en el orden al gobierno autónomo de las Universidades pedía precisamente, la participación estudiantil en el gobierno de éstas y la libre docencia.

José Vasconcelos

Vasconcelos lo logró uniendo a la "familia universitaria" creando en ella una conciencia cívica y un espíritu de lucha. Pidió a la juventud su colaboración ayudándole a iniciar una lucha a muerte contra el analfabetismo.

El pensamiento de autonomía universitaria se venía gestando diecisiete años antes del triunfo y era un anehlo que se transmitía de generación a generación.

A finales de los años veintes, México vivía uno de sus momentos históricos más apasionantes, estaba la persecusión religiosa de la guerra cristera, Álvaro Obregón para reelegirse como presidente y la lucha por la autonomía de la UNAM.

Los estudiantes mexicanos estaban agrupados y el pensamiento de autonomía era el ideal que siempre habían perseguido. 

Después fue nombrado rector de la Universidad el licenciado Antonio Castrlo Leal, y éste informó a la prensa sobre el nuevo sistema de reconocimientos trimestrales que sería impuesto a las facultades, noticia que molestó a los estudiantes al grado de que presentaron su descontento.

Narciso Bassols informó a los estudiantes que el programa de reconocimientos trimestrales se efectuaría en la Facultad de Derecho y Ciencias, y por su parte, el doctor Castro Leal hizo las siguientes declaraciones: "La Universidad, con autorización de la SEP, declara que de ningún modo considera la posibilidad de derogar el reglamento de reconocimientos en la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales, pues son absolutamente necesarios para el aprovechamiento de los alumnos". Pero al conocer los estudiantos que el rector Castro Leal no reconsideraba el acuerdo sobre el programa de reconocimientos y que estaba dispuesto a que se inciara el 12 de mayo, convocaron una asamblea general urgente, que tuvo lugar en el salón de actos, la que fue presidida por el presidente de la Sociedad de Alumnos Arcadio D. Guevara y posteriormente se realizó una votación sobre exámenes finales o reconocimientos.

Después del triunfo de la votación por el antiguo sistema de exámenes finales, una comisión de estudiantes se dirigió a la Universidad para comunicar una resolución al rector Castro Leal, al no haberlo encontrado hablaron con el licenciado Daniel Cosío Villegas, que ofreció transmitirlo al rector. El secretario del ramo dijo a los estudiantes que la resolución del Consejo Universitario será inapelable para la SEP, que se encargará de cumplirla en cuanto le sea notificada.

Al salir los estudiantes, acordaron que el día 12 entrarían a la escuela pero que se abstendrían de sustentar reconomienta; declaraban la huelga de mentes quietas, así se le denominó, pero la rectoría mantuvo su determinación.