Como bien sabemos, el día 22 de mayo de 1929 hubo un enfrentamiento entre estudiantes y policía. El presidente Portes Gil hizo las siguientes declaraciones:
"Los sucesos ocurridos el día de ayer con motivo de la huelga han sido profundamente lamentados por mí. Estimo conveniente que esta situación anómala termine cuanto antes, y a tal efecto, la Presidencia de la República ha dictado las medidas necesarias que desde luego han sido puestas en práctica. En consecuencia, los estudiantes pueden, con toda libertad, volver a sus escuelas y deliberar en ellas cuando lo deseen, en la inteligencia de que no se les molestará en sentido alguno. Como es necesario conocer a fondo cuáles son los propósitos que animan la actitud de los estudiantes en la huelga, me permito excitarlos para que, previas las deliberaciones que tengan, se presenten ante el suscrito, ya sea personalmente o por escrito, a la hora y momento en que lo juzguen pertinente.
Emilio Portes Gil
El conflicto universitario iniciado en la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales se convertía en un verdadero problema para el gobierno. Los acontecimientos de la noche del 23 de mayo exaltaron los ánimos y motivaron que se uniera a la huelga casi la totalidad de las escuelas del Distrito Federal, así como un gran número de estudiantes de provincia que telegráficamente enviaban su adhesión al movimiento.
Por la tarde, los policías que custodiaban los edificios de la universidad, Escuela Normal Preparatoria, SEP, Universidad Nacional y otros planteles-, fueron retirados por oden del presidente de la República, causando gran alegría entre la grey estudiantil que convocó a una asamblea para tratar sobre este acontecimiento.
El día 24 de mayo, presentó su renuncia el entonces director de la Facultad de Derecho, Narciso Bassols.
El día 25 de mayo en la Facultad de Medicina se efectuó una reunión, durante la cual el presidente del Comité de Huelga, Alenadro Gómez Arias explicó a los estudiantes el motivo que inició el conflicto, así como los anhelos de ellos de pertenecer al Consejo Universitario.
El Comité de Huelga también se reunió a discutir sobre el pliego de peticiones que enviaría el señor Presidente y sobre la comisión que le entregaría el pliego al Primer Magistrado.
Por otra parte, el Comité de Huelga sesionó para organizar una manifestación gigante, en la que intevinieran miles de estudiantes y que simultáneamente se llevara a cabo en esta capital y en los Estados de la República.
El 28 de mayo se efectuó una manifestación de protesta, en la que se pedía la "Reforma Universitaria" mediante imponentes pancartas y carteles que llevaban los estudiantes, los que decían "Pedimos maestros revolucionarios y no políticos de ocasión", "Estudiantes y obreros unidos", "Defenderemos nuestra causa hasta en las barricadas", "Protestamos contra el asesino de la juventud Valente Quintana", "Las ideas no se combaten con las armas", y otras frases.
Los estudiantes de leyes, veteranos en el conflicto, encabezaban la manifestación. El día 28 de mayo de 1929, el Presidente de la República contestó el pliego de peticiones que le había formulado el Comité de Huelga, con una trascendental carta en la cual Portes Gil promete a los estudiantes la autonomía de la Universidad.
Y es de esta manera que termina el grave conflicto que culminara con la huelga general de las escuelas profesionales y que dio cima a la autonomía de la Universidad Nacional, que venía siendo desde el año de 1910 una legítima aspiración del conglomerado universitario.
El rector de la Universidad Nacional, Antonio Castro Leal, dio a conocer al Congreso su opinión sobre la iniciativa presidencial y dijo que podemos decir que está a punto de realizarse uno de los ideales más nobles y más anitguos de los universitarios mexicanos, ahora que, con gran generosidad y clara visión, el señor Presidente ha manifestado su propósito de conceder definitivamente por medio de una ley, la autonomía de la Universidad Nacional de México.
Antonio Castro Leal
Ignacio García Téllez, primer rector de la UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO como tal.
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